El personal de LCG se reunió para compartir un hermoso almuerzo navideño , donde vivimos lindos momentos.
Desde juegos y sorteos hasta premios y risas, pero lo más importante fue agradecer a Dios por un año maravilloso y por tener la bendición de estar juntos como familia Liceína.
Cada risa, cada abrazo y cada instante compartido nos recuerda lo valioso que es trabajar en equipo y caminar unidos. ¡Gracias a todos por ser parte de esta gran familia!
Que esta Navidad sigamos disfrutando de la esperanza y el amor que trae Jesús a nuestros corazones.